La diputada federal de Morena por el distrito 9, Araceli Brown Figueredo, expresó su preocupación ante la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, sobre las acciones de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana (FESC), que desde el 6 de marzo sustituyó a la policía municipal en el municipio de Playas de Rosarito.

Brown Figueredo acusó que, desde que la Policía Estatal asumió el control de la seguridad pública en dicho municipio, han aumentado las denuncias por abusos de autoridad, allanamientos ilegales y robos de pertenencias a ciudadanos que no estaban cometiendo ninguna infracción. La ex alcaldesa de Rosarito dirigió una carta a la mandataria estatal el 20 de marzo, en la que subrayó la gravedad de la situación.

En su mensaje, la legisladora hizo un llamado a Ávila Olmeda, quien también pertenece al movimiento de la Cuarta Transformación, para que se comprometa con la legalidad, la justicia y la paz social. En este sentido, recordó que la policía debe ser una institución cercana a la comunidad, tal como lo promueve el gobierno federal.

“La ciudadanía no merece vivir bajo amenaza, temerosa de quienes están encargados de su seguridad”, señaló Brown Figueredo, quien destacó que en 2024 Rosarito salió de la lista de los 50 municipios más violentos del país, gracias en parte a la policía municipal certificada con un 95% de aprobación en los exámenes de control y confianza realizados por el gobierno estatal.

La ex perredista destacó los avances de Rosarito en los últimos años, tanto en el ámbito económico como social, y expresó su preocupación por el retroceso que representa la actual situación de abuso de poder y el temor de la ciudadanía, “como si estuviéramos regresando a los tiempos previos a la llegada de la 4T”.

Finalmente, demandó a la gobernadora que investigue y sancione a los responsables de estos abusos, con el fin de frenar esta ola de violaciones que atentan contra la paz social.

El refuerzo de operaciones en Rosarito se implementó como parte de un acuerdo del Consejo Estatal de Seguridad y las Mesas de Seguridad de Baja California, con el objetivo de sustituir a los agentes municipales. La Secretaría de Seguridad Ciudadana de BC informó que el reemplazo se haría de manera gradual, en un lapso de dos a tres semanas, comenzando por las zonas Norte y Centro, mientras que los agentes municipales se someterían a exámenes de control y confianza en los próximos días.