Como parte de la Estrategia Nacional de Seguridad, el Gobierno de México reforzó este lunes la vigilancia en Tijuana con el despliegue de 320 elementos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y el envío de 80 vehículos oficiales.
El operativo tiene como objetivo contener la violencia en zonas con alta incidencia delictiva, particularmente en siete colonias identificadas como prioritarias:
- Lomas Taurinas
- Sánchez Taboada
- Otay
- Terrazas del Valle
- San Antonio de los Güeros
- Camino Verde
- Emperadores
Además, se incrementará la presencia federal en la zona Centro de la ciudad, en coordinación con fuerzas estatales y municipales.
Las autoridades informaron que los nuevos elementos se integrarán a los operativos ya existentes en la región, en los que participan efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional y corporaciones de seguridad del estado.
Con este refuerzo, el Gobierno federal busca inhibir delitos de alto impacto, mejorar la percepción de seguridad y recuperar la confianza ciudadana en los sectores más afectados por la violencia.

